Elvis... The King is Dead, Long Live The King

THE KING IS DEAD, LONG LIVE THE KING

Es joven y viejo. Es delgado e hinchado. Es negro y blanco. Es country y soul. Es rico y pobre. Es sobrio y adicto. Es espiritual y pecador. Es de Tupelo, donde nació, y de Graceland, donde murió. Es Elvis.

Tres décadas después de su muerte, a los 42 años, Elvis Presley aún es todo para todo mundo. Es el sueño y la pesadilla estadounidenses en una sola persona.

Qué vida tan extraordinaria: un niño de lo más pobre que se convirtió en estrella de rock, ícono de una generación y héroe cinematográfico, que revolucionó la música y la cultura estadounidenses.

Independientemente del mito, la verdad fundamental de Elvis no puede negarse: cambió el mundo con su música y, en los albores del movimiento de los derechos civiles, ayudó a tender un puente en la brecha racial cultural de EU.

Desde ayer, miles de fans están reunidos en Graceland, su mansión en Memphis, Tennessee, y alrededor del mundo, para conmemorar el 30 aniversario de su muerte y recordar su vida.
"Elvis aún es relevante por el impacto de su música y el vínculo emocional con ella", señala Peter Guralnick, autor de obras biográficas reconocidas sobre Presley.

La música de Presley abarca seis décadas, y constituyó una fuerza revolucionaria, con una combinación de rhythm & blues y música country, cuando nació, a principios de los 50.
En ese entonces, EU era un país agitado por la segregación racial, sin mencionar una creciente población posguerra de chicos a punto de entrar en la adolescencia.

"Una razón por la que recordamos a Elvis es el grado al cual su música rompió barreras y categorías de una manera que aún tiene relevancia general en la actualidad", expresa Guralnick.
Y en la cuestión racial está al meollo del ascenso de Elvis. El cantante era un hombre blanco que cantaba como uno de raza negra.

"¿Quién puede decir que Elvis, en realidad, no era negro?", dice Deanie Parker, presidenta del Museo Stax de Música Soul Estadounidense, en Memphis.

"Sonaba negro, creció en un barrio negro, asistía a una iglesia negra y sus influencias musicales eran negras. Yo soy negra y creo que la gente aceptaba a Elvis sin importar su origen racial", asegura Parker.

"Algunos en la comunidad afroamericana veían a Elvis con recelo, pero tengo que decir que la gran mayoría de las personas de raza negra lo acogió porque él tenía un gran respeto por la música negra y la cultura afroamericana. Sólo puedes ser lo que eres; Elvis fue parte de Memphis y su cultura y música singulares".

Memphis era una intersección en el sur estadounidense: un lugar donde personas de raza negra y blanca iban a trabajar y a divertirse, y la música se volvió parte del paisaje urbano. Elvis representaba la encrucijada de la música estadounidense en un momento cuando el cambio racial estaba en el aire.

En este nuevo mundo, blancos y negros podían unirse para formar algo especial en la música, y Elvis era el líder.

"Elvis apreciaba los valores democráticos. No fue sólo la música negra, sino también el country, el pop, el rock y la ópera", señala Guralnick.

"Rendía homenaje a su amor a la música de una manera que no diferenciaba entre los géneros. No veía a la música o a la sociedad como divididas según las categorías establecidas".
Jerry Schilling, quien tenía 12 años cuando conoció a Elvis en Memphis, recuerda que el cantante de ópera Mario Lanza era un favorito de Elvis.

"Tuvo muchísimas influencias y las conjuntó de una manera muy suya", dice Schilling, autor de "Me and a Guy Named Elvis".

Sin embargo, a medida que pasaron los años, el ídolo, de alguna forma, perdió su fervor revolucionario. El coronel Tom Parker, su representante, parecía explotar a Elvis como un producto, y los estándares del artista cayeron en favor de las películas y las grabaciones.
Otro golpe fue su divorcio, en 1973, de su esposa Priscilla, cuando Elvis perdió la custodia de su única hija, Lisa Marie.

"Lo que se ve al final es una persona con depresión clínica", manifiesta Guralnick. "La depresión prácticamente lo paralizó en los últimos cuatro o cinco años de su vida".

Y así, al final, las imágenes que definen a Elvis son de un cantante con sobrepeso, bañado en sudor, enfundado en un traje blanco de una sola pieza, que batalla para terminar sus presentaciones.

"Perdimos a Elvis temprano debido a una decepción creativa", afirma Schilling, al agregar que Presley quería iniciar su propia compañía de producción de cine y trabajar en diversos proyectos, pero no se le permitió seguir sus instintos creativos.

Pese a todos sus logros, sus aspiraciones fueron sencillas.

"Su único propósito era ser aceptado y amado", dice Schilling. "Eso era lo único que buscaba".
Y lo encontró en sus fans.

"Rechazó la etiqueta de rey. Elvis buscaba, más que nada, tomar su lugar entre los músicos y la música que él sentía que eran tan grandes", menciona Guralnick.

Elvis alcanzó esa meta, y tal vez eso explica por qué nuevas generaciones de fans siguen descubriéndolo.

Hace 30 años encontraron a un hombre muerto en Graceland. Pero Elvis sigue vivo.

El ídolo de los grandes


Elvis Presley ha tenido una gran influencia en innumerables estrellas de la música, quienes en algún momento lo alabaron.

"Cuando oí la voz de Elvis por primera vez, supe que no iba a trabajar para nadie y que nadie me iba a dar órdenes. Oírlo por primera vez fue como escaparme de la cárcel".
Bob Dylan


"Elvis es el mejor, el más original de todos. Puso a rodar las cosas para todos nosotros. Merece todo el reconocimiento".
Jim Morrison


"Antes de Elvis no había nada".
John Lennon


"Cuando éramos niños, en Liverpool, lo único que queríamos ser era Elvis Presley".
Paul McCartney


"Lo amo y espero verlo en el cielo. Jamás habrá nadie como ese hermano del alma".
James Brown

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Es innegable la influencia que ha tenido Elvis sobre la música rock, fue el máximo exponente de éste género, su Dios principal. A 30 años de su muerte aún sigue vigente.

Mi canción favorita de Elvis: Don't Be Cruel